MURAIL, MARIE AUDE
No todos los detectives son tipos rudos. Nils Hazard, por ejemplo, es un aburrido profesor universitario, pero tiene talento para resolver casos inusuales, aunque su método es más imaginativo que deductivo. Lo hace tan bien que su guapa cómplice, Catherine, lo llama cazador de enigmas. Lo que ella no sabe es que el propio Nils tiene un secreto en su pasado: un enigma que debe resolver para sí mismo.