MUÑOZ LEDO, NORMA
El corazón es el taller del ermitaño donde el amor confecciona sus deseos silenciosos, sus lánguidos suspiros, sus penas dulces y secretas y las esconde bajo sus alas, afirma el poeta Matthias Claudius. Y es cierto, porque el corazón es nido, memoria, sueños, es la flama que enciende la vida. Así lo descubre Olivia, una joven quien, luego de recibir un trasplante de corazón, comienza a experimentar el mundo de una manera tan intensa y desconocida que la lleva hasta las raíces de su nuevo huésped, el corazón de Andrea. Este viaje al interior de sí misma, la conducirá también por la tierra caliente de Guerrero, el hogar de su donadora, donde la violencia y la injusticia, pero también el amor y la ternura, le permitirán conciliar los latidos que revolotean como pájaros en su pecho. Por primera vez sintió suyo ese corazón rojo, palpitante, cortado de alguien, cosido en ella, echando raíces mientras se abría, mostrándole estrellas, constelaciones y galaxias; dejándole ver el universo que había en él.