SERRANO FRANCISCO
Cuando llegó a su casa, el profesor Persiles Tarantado se sorprendió: debajo de la puerta había un mensaje de la Oficina de Correos con el aviso de que a la mañana siguiente pasarían a entregarle un par de cajas provenientes de Rumania. En las cajas descubrirá dos huéspedes que en apariencia son unos niños normales, pero con un origen y un apetito escalofriantes.