OCHOA, ENRIQUE
El PRI es revolucionario porque defiende los principios de la Revolución mexicana y porque cree en la transformación permanente del país. Además, es un partido convencido de que los cambios sólo pueden darse si se respetan las instituciones y las leyes. Por esa razón, el PRI es al mismo tiempo revolucionario e institucional. La revolución de hoy es incluyente y cultural. Es pacífica e intergeneracional. Es tecnológica y digital. Se hace en las aulas y se impulsa con energías renovables. La revolución de hoy reclama lo mejor de las mujeres, los jóvenes y los hombres de México. La marcha histórica del PRI continúa, con fundamento en las mismas convicciones ideológicas, pero a partir de nuevas propuestas y con renovadas reglas internas, para enfrentar, todos juntos, los retos por venir.